El caso Diddy: fiestas salvajes con DiCaprio, Beyoncé y Jay-Z
La reciente detención del rapero y productor Sean 'Diddy' Combs ha desatado un gran escándalo en Hollywood, debido a las fiestas que organizaba, a las cuales acudían reconocidas figuras del entretenimiento y el deporte, y en las que se cometían presuntamente numerosos delitos sexuales.
Actualmente, la policía está investigando a Combs por una serie de graves delitos, que incluyen tráfico sexual, trabajo forzado, transporte de personas con fines de prostitución, delitos relacionados con drogas, secuestro, incendio premeditado, soborno y obstrucción a la justicia.
Aunque las fiestas anuales del rapero eran muy conocidas, no todos los invitados tenían acceso a los eventos más privados dentro de su mansión, donde presuntamente se llevaban a cabo actos sexuales. Muchas celebridades se quedaban en la parte visible de las fiestas, mientras que en el interior ocurrían actividades ilícitas.
Las investigaciones revelan que estas fiestas, organizadas principalmente en su propiedad de los Hamptons, servían como fachada para ocultar sus actividades delictivas, lo que también le permitía ganar influencia en el mundo del espectáculo.
Celebridades que asistieron a las fiestas de Diddy
Jennifer López
Leonardo DiCaprio
París Hilton
Ashton Kutcher
Kim Kardashian
Howard Stern
Kelly Osbourne
Aretha Franklin
Martha Stewart
Tommy Lee
Lady Gaga
Taylor Swift
Pamela Anderson
Regis Philbin
Russell Brand
Vera Wang
Jay-Z
Beyoncé
Mariah Carey
Justin Bieber
Nick Cannon
Sin embargo, aún no se ha determinado quiénes entre estas celebridades estaban al tanto de los crímenes de tráfico sexual en los que estaba involucrado Combs, ni quiénes podrían haber estado relacionados con sus actividades.
¿Cómo eran las fiestas 'Freak off' de Diddy?
El productor supuestamente drogaba tanto a hombres como a mujeres durante estas fiestas, para luego cometer abusos sexuales conocidos como 'freak off', los cuales grababa en video. Las víctimas, que perdían el control de sus acciones, podían permanecer en estas fiestas durante días y necesitaban recibir tratamiento intravenoso para recuperarse. Según la investigación, Combs utilizaba las grabaciones para extorsionar a las personas involucradas, amenazando con hacer públicos los videos si hablaban.
Tony Buzbee, uno de los principales abogados de las víctimas, declaró en una rueda de prensa en Houston: "El mayor secreto de la industria del entretenimiento, que realmente no era un secreto, ha sido finalmente revelado al mundo. El muro de silencio se ha roto".
Las víctimas incluyen tanto hombres como mujeres, con edades que iban desde los 9 hasta los 38 años en el momento de los abusos, entre los que se encuentran 25 menores. Los ataques abarcaron un periodo de dos décadas, desde los años 2000 hasta 2010, cuando Combs se encontraba en el auge de su carrera.
Los abogados han recibido en solo diez días más de 3.000 denuncias contra Diddy, de las cuales han verificado y considerado creíbles al menos 120 casos.
Además de las acusaciones de agresión sexual y abuso, los abogados también planean acusar a Combs de facilitar sexo bajo los efectos de drogas, encarcelamiento ilegal, difusión de videos grabados sin consentimiento y abuso sexual infantil.